MUJERES

Siempre he pensado que las mujeres tenemos dones especiales, estamos estructuradas en cuerpo y alma para lo que verdaderamente importa: la búsqueda del otro, de la persona en su totalidad.

Queremos agradar, buscamos atraer, lograr que todos estén a gusto, que se sientan queridos, importantes, deseamos saber más, siempre saber más de los otros, sabemos conciliar, podemos dejar lo nuestro para después si lo consideramos necesario, sin absolutamente sentirnos víctimas o heroicas.

También gozamos de una sensibilidad especial para consolar, animar y buscarle un buen ángulo a las cosas que parecen no tenerlo.

Con gran fortaleza para encarar la adversidad, sacando adelante lo que haya que sacar, elevando lo que le rodea al nivel de humanidad.

Llevamos el sentido de la belleza en nuestro ser, y podemos transmitirlo con naturalidad.
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Sí, definitivamente las mujeres hacemos falta para dar nuestro toque al convivir de hoy ,recuperando a la persona como centro y razón de la vida.